La comprensión lectora se define como: “La capacidad de una persona para entender, valorar y utilizar textos escritos, para adquirir objetivos personales, desarrollar el propio conocimiento y potenciarlo, asà como también para poder participar en la sociedadâ€.
Todos los conocimientos que tienen que adquirir los alumnos y alumnas en el colegio se definen en el currÃculo educativo. Este documento elaborado por el Departamento de Educación, contiene toda la información sobre las competencias y conocimientos que tienen que desarrollar los niños y niñas durante cada curso escolar y describe las competencias básicas de cada área a trabajar que se tendrán que adquirir al acabar cada etapa.
Las áreas que se trabajan son:
- Ãrea lingüÃstica.
- Ãrea de matemáticas.
- Ãrea del conocimiento del medio.
- Ãrea artÃstica.
- Ãrea educación fÃsica.
- Ãrea educación en valores.
- Ãrea digital.
La comprensión lectora es la dimensión del área de lengua que nos ayudará a conseguir que los niños y niñas disfruten leyendo. Esta dimensión está formada por cuatro competencias:
- Competencia 1: Leer con fluidez para comprender textos de la vida cotidiana, de los medios de comunicación y escolares en diferentes soportes y formatos.
- Competencia 2: Aplicar estrategias de comprensión para obtener información, interpretar y valorar el contenido de acuerdo con la tipologÃa y la complejidad del texto y el propósito de la lectura.
- Competencia 3: Utilizar, para comprender un texto, la estructura y el formato de cada género textual y el componente semántico de las palabras y de las estructuras morfosintácticas más habituales.
- Competencia 4: Aplicar estrategias de búsqueda y gestión de la información para adquirir conocimientos propios.
Las competencias ayudan al profesorado a definir los objetivos de sus prácticas dentro del aula. En este caso, en la asignatura de lengua. El objetivo final de la lectura es que los niños y niñas sean capaces comprender todo aquello que leen, pero no es fácil llegar hasta este punto. Antes se han tenido que trabajar todas las habilidades de pre-lectura, haber iniciado el proceso lector y saber leer perfectamente.  Una vez superados todos estos requisitos, los alumnos y alumnas estarán preparados para comprender aquello que leen.
Cada alumno es un mundo y el profesorado ha de contar con herramientas que le permitan dar el apoyo que necesita a cada uno. No podemos empezar la casa por el tejado, es por eso que tenemos que ir asentando las bases para tener una buena lectura, siempre respetando el ritmo de aprendizaje de cada alumno, porque sino la lectura se convertirá en una actividad que los niños y niñas rechazarán debido al esfuerzo que les supone realizarla.
Para conseguir que los niños y niñas disfruten de la lectura tenemos que conseguir que sea una actividad motivadora para ellos desde pequeños, implicarnos en su proceso de aprendizaje y en aquellos casos que los alumnos no tengan las estrategias para aprender a leer, ofrecer recursos para ayudarles a desarrollar sus capacidades.